Me entrevistó Iván Fombella de El Mundo sobre profesores universitarios y redes sociales para su artículo «Profesores 2.0: la comunidad docente sale al encuentro de la sociedad en el entorno digital» (PDF). Esto es lo que le conté:
¿Cómo cree que deberían usar los profesores universitarios las redes sociales?
Las redes sociales pueden utilizarse como recurso didáctico para extender las clases más allá de las aulas y como plataforma de difusión para mejorar la visibilidad de la marca personal de los docentes.
¿Es difícil compaginar el ser ameno (para tener un buen número de seguidores) con ser riguroso en lo que se dice? ¿Cuál es la ‘fórmula’ (o las ‘fórmulas’)?
En las redes sociales se pueden hacer muchas cosas, salvo complacer a todo el mundo. Es preferible enfocar bien el contenido para construir redes de calidad.
¿En España vamos muy retrasados en este aspecto (el del uso de redes sociales y blogs por los profesores) con respecto a otros lugares?
En Estados Unidos y en América Latina, por razones diversas, ha habido un proceso de adopción académica de tecnologías «sociales» más rápido que el que hemos tenido en España. La ventaja de llegar más tarde, si se sabe aprovechar, es que te permite evitar los errores de los pioneros y apostar, directamente, por las plataformas más consolidadas.
¿Cree que estos nuevos entornos están ayudando a tener una relación más cercana con los alumnos y otros profesores o investigadores? ¿O más bien al revés, la ha expandido a más personas, pero haciéndola más lejana?
Las redes sociales nos ayudan a crear nuevos espacios de comunicación en el ámbito académico ya que virtualizan los espacios tradicionales (el despacho, el aula, la biblioteca y el laboratorio). Gracias a las tecnologías de la conectividad estamos redescubriendo y experimentando el alcance de la visión mcluhiana del «aula sin muros».