La decisión de Google de penalizar, mediante bajadas de PageRank, a websites y blogs que participan en programas de publicidad basados en la venta de enlaces, me trae a la memoria una célebre escena de Casablanca
Renault: ¡Salgan inmediatamente!
Rick: ¿Con qué derecho me cierra usted el local?
Renault: ¡Es un escándalo! ¡He descubierto que aquí se juega!
Croupier: Sus ganancias, señor.
Renault: Muchas gracias. ¡Todo el mundo fuera!
Me parece una medida que revela hipocresía y abuso de posición dominante. Le pregunto a Enrique Dans, sorprendido ante su entrada Google limpia la red: ¿No son acaso enlaces lo que vende Google? Ante su respuesta:
vende elaces, pero no PageRank. Me parece perfectamente legítimo vender enlaces de texto si estos llevan un nofollow para evitar distorsionar el índice. Pero pagar para que te “inyecten” una relevancia que de manera natural no tendrías, no.
tengo que preguntarme:
¿no es esto acaso pagar para que te “inyecten” una relevancia que de manera natural no tendrías? (publicidad, en definitiva, que es de lo que va este juego).
Ocurre que aunque el pastel está siendo cada vez más grande, parece que hay quien quiere comérselo solo, aprovechando que es el más fuerte de la fiesta.
Como bien dice Antonio Ortiz: Google sacó su fusil. Me temo que el monstruo ha comenzado a devorar a sus hijos.
En lo que a este sitio respecta (que hasta el momento mantiene PR6) no estoy dispuesto a aceptar que alguien me imponga el tipo de publicidad que puedo incluir.