El día en el que todos estábamos pendientes de la toma de posesión de Barack Obama va Juan Luis Cebrián y anuncia que El País se reinventa:
Soy de los que cree y predica acerca de la necesidad de reinventar los medios, de modo que a la espera de datos más precisos habrá que otorgarles el beneficio de la duda. En cualquier caso, y detrás de todas las frenéticas movidas de las últimas semanas en este sector en España, tengo la impresión de que el inminente lanzamiento del nuevo proyecto de Dixired está poniendo nerviosa a mucha gente.
He consultado a algunas personas sobre este anuncio, e iré publicando aquí sus opiniones a medida que las reciba:
Manuel Almeida: Mi posición es la de bienvenida, el hecho de que un periódico-empresa de este empaque se plantee una crisis de modelo es algo que denota que vamos por el buen camino. No ha sido una sorpresa, en realidad creo que los medios en general, y los españoles en particular, están tardando más de lo que sería prudente en hacer frente a la crisis. Ahora bien, si la ‘reinvención’ significa seguir los pasos de ADN, es decir integración de la redacción con Internet como convidado de piedra, estaríamos ante una grave estrategia que, lejos de avanzar hacia la solución, nos retrotrae un par de décadas atrás. La única solución para el periodismo es la que se desprende del propio discurso de Cebrián: «En cinco años, con toda seguridad existirán periódicos escritos. Dentro de 10, si se hacen las cosas precisas, a lo mejor, probablemente sí. En 15, no estoy seguro de que sigan existiendo tal y como los conocemos». Vamos, que en esto de la comunicación tradicional, en 20 años, todos calvos. Así que sólo pido que sea consecuente. La única apuesta de futuro pasa por abordar el fenómeno de Internet de cara, sin tapujos ni prejuicios, y lanzarse de lleno a construir el nuevo periodismo.
Miguel Ángel Jimeno: La verdad es que esa revolución es por ahora muy vaga. La apuesta es la integración para elaborar contenidos de calidad. ¿Qué es integración? ¿Y qué son contenidos de calidad? Habrá que ver cómo se integran Goliat y David. Creo que el problema de EP no son simplificando mucho, los contenidos de calidad, sino alejarse de los contenidos partidistas (partidistas: de un partido, de su casa…). Más calle y más pluma. Con eso me conformaría.
Sergio Martínez Mahugo: En mi opinión la reestructuración llega tarde, muy tarde. Pero sobre todo el problema es que no tengo del todo tan claro que lo se nos vende como ‘reestructuración’ no sea al final realmente una absorción o fagocitación similar a que va a llevar a cabo ADN con adn.es.
Si a Obama que tiene que resolver problemas más graves se le van a dar cien días de gracia, también habrá que dárselos al mastodonte de Prisa. Pero para empezar, la propia nota del anuncio no contiene ni un sólo enlace. ¡Mal comienzo!
La buena noticia es que si los grandes grupos se mueven en esta línea… sigue habiendo un espacio para nuevos medios, con novedosas estructuras, otros modelos de negocio y dispuestos a apostar por productos informativos distintos y más interesantes.
Pablo Mancini: El anuncio no ofrece demasiadas precisiones sobre cómo se reinventará El País, pero espero que les vaya muy bien y puedan abrir nuevos rumbos para una industria que se desinventa sin parar. La arquitectura actual del periodismo -los perfiles profesionales, las redacciones, los productos que ofrecemos, los modelos de negocios, todo- continúa siendo muy similar a la de los años ’50, y parece muy difícil que con una infraestructura así resulte posible sobrevivir en un contexto que nada tiene que ver con aquellos años. La industria está pasando por un profundo rediseño. En plena crisis, muchos se vuelven conservadores. Otros, los menos, apuestan por el cambio. En cualquier caso, estaremos atentos a la reorganización que anuncia Cebrián. Esperamos poder aprender de esa experiencia.
Otras reacciones: La dictadura de las marmotas, El País integra redacciones y reorganiza su estructura en tres empresas y Tres empresas para un solo El País.