Luego de una intensa semana mexicana regreso a Pamplona con un maravilloso cargamento de buenos recuerdos: el reencuentro con los amigos, los nuevos lazos trenzados y el descubrimiento de otros rincones en el inabarcable D.F.
A las actividades académicas en la Anáhuac del Sur (conferencia y taller) les siguió una mañana de paseo por Coyoacán con Gustavo y Abelardo, y una entrañable Beers & Blogs que se prolongó hasta la medianoche (hay listas de gente, vídeo y fotos).
El domingo estuvimos en La Ciudadela con mis amigos del TEC Amaya y Octavio, comida en una magnífica cantina y entrevista para el Excélsior de camino al aeropuerto.
Espero volver en marzo, con motivo del Foro Internacional América Latina en la Sociedad del Conocimiento.