Este mes ha salido a las librerías la versión en español del libro que recopila extractos del famoso warblog de Salam Pax: Where is Raed ?
Se publica en la colección Arena Abierta de Mondadori como Salam Pax. El internauta de Bagdad (es una lástima que no hayan respetado el título original: The Baghdad Blog).
En la Introducción, Ian Katz de The Guardian (uno de los primeros medios que solicitó a Salam Pax autorización para reproducir sus posts, y del que actualmente Salam es columnista), se despacha con esta definición de la comunidad internacional de bloggers: «esa banda cada vez más nutrida de cotorras electrónicas cuyas diatribas, reflexiones y banalidades autoeditadas se han convertido en el nuevo fenómeno más atractivo de Internet» (p.11). En fin, ya se ve que «el recelo instintivo de todo weblogger hacia la gente de los viejos medios» (p.16), es recíproco.
El testimonio de Salam Pax, seudónimo del arquitecto iraquí que desde las afueras de Bagdad realizó en un blog la cobertura más interesante de toda la guerra, atrapa desde el primer párrafo:
Me llamo Salam Pax y soy adicto a los blogs. Hay gente que ve los culebrones matinales, yo sigo blogs. Sigo los hiperlinks de los blogs que leo. Viajo por la red guiado por los bloggers. Me enredo en las historias que cuentan. Leía tantos blogs que tenía que asignarle un día de la semana a cada grupo, sin contar los que leía a diario. Es una práctica un poco voyeurista, sobre todo con los blogs realmente personales: asuntos cotidianos y triviales que en realidad resultan fascinantes. Vislumbres de vidas muy distintas y montones de escritos asombrosos. Nada de política, solamente la vida de la gente. Cómo soportan el dolor o la tristeza y cómo comparten los momentos de felicidad con cualquiera que los quiera leer. Y yo quería. No teníamos acceso a la televisión por satélite y las revistas solamente podían entrar en el país de contrabando. Gracias a los blogs yo podía asomarme a un mundo distinto (p.17).
El texto, cuya lectura les recomiendo, se cierra con una lista de weblogs a modo de agradecimiento «Leedlos. Son como el lema del helado de yogur: le da algo a tu vida» (pp.249-250):
Ver sobre el tema: Warblogging en la guerra de Internet.